El vuelo (Flight, 2012), estreno nacional de la semana, supone el
regreso del realizador Robert Zemeckis al cine de acción real -ello es no
animado o de otras técnicas parecidas- tras más de una década dedicado por
entero a sus incursiones en el, ya por sí convertido en subgénero, motion
capture o captura de movimiento: El expreso polar, Beowulf y La estrella polar.
Describe, mediante segmento introductorio de factura técnica fabulosa
muy propia del creador de Contacto, el accidente del avión pilotado por el
comandante Whip (Denzel Washington, en la mejor captación suya de un personaje
en los últimos años, luego de Día de entrenamiento y American Gangster). Este
señor, empero, logra salvar a casi todos los pasajeros, gracias a sorprendente
pericia, la cual los conocedores califican como verdadera hazaña profesional.
Sin embargo, el hombre, alcohólico, comandaba la nave ebrio desde la noche
anterior.