En buena parte de la teleficción latinoamericana, de Televisa a Caracol
y O´Globo, la superficie de la imagen no coincide con el fondo espacial
legítimo de los contextos enfocados. De tal suerte, el cien por ciento de las
telenovelas mexicanas y segmento considerable de las colombianas y brasileras
trabajan sobre el subconsciente de 200 millones de televidentes a partir del
arte del escamoteo, el sofisma y la desvirtuación. Esa constituye una de las tantísimas
razones por las cuales los culebrones regionales son paupérrimos productos
audiovisuales ultrapolitizados, cuya factura responde a pautas de sojuzgación
mental exquisitamente diseñadas, dada su apariencia de invisibilidad.
lunes, 27 de enero de 2014
jueves, 23 de enero de 2014
Bámbola: sin compasión con la rubia
El hace poco fallecido Bigas Luna,
quizá el cineasta más irregular, polémico y contradictorio de la península
ibérica sistemáticamente activo en las últimas tres décadas, es un creador
lleno de sorpresas que lo mismo podía perpetrar el softcore setentero
que coronar obras interesantísimas a la manera de Bilbao; Jamón, jamón; La teta
y la luna y La camarera del Titanic, o bien flagelar al espectador con churros
seudoeróticos corte Huevos de oro o Las edades de Lulú, o nada más provocar
indiferencia con cosas de tan poco fijador como Volaverunt y la lastimosamente
insípida Son de mar.
sábado, 18 de enero de 2014
Prisoners: Villeneuve arma un buen thriller
El subgénero negro de niños raptados/investigación policial se da la
mano en el thriller Prisioneros (Prisoners, 2013), con un realizador quien, en
primer lugar, conoce el arte de la narración esculpido por los directores del
Hollywood dorado, los clímaxs, los tiempos, la construcción de personajes y
que, en segundo lugar, se ha favorecido tanto de un equipo técnico como de un
cuadro actoral cuyos integrantes bastante coadyuvaron a imprimirle a su relato
esa sensación de angustia, desasosiego, temor e incertidumbre precisa en trama
semejante.
martes, 14 de enero de 2014
El Quo Vadis de Jerzy Kawalerowicz
Estrenada en la
Cinemateca de Cuba como parte del ciclo Lo bueno, lo malo y
lo feo, la película polaca Quo Vadis fue la última en realizar por uno de los
tan prolíficos como eclécticos directores de dicha filmografía: Jerzy
Kawalerowicz, quien fallecería en 2007, siete años después de su estreno.
viernes, 10 de enero de 2014
Gangster sin nombre de verdad no tiene nombre
Como antes hemos comentado en La viña de los Lumière, el surcoreano
constituye uno de los cines más pujantes del mundo durante el siglo actual.
Ahora bien, ni todos sus exponentes resultan meritorios, ni ha devenido del
todo correcta en cuanto a selección jerárquica, como tampoco sistemática, su
exhibición en Cuba.
martes, 7 de enero de 2014
Elyseum, otra cara más palomitera de Blomkamp
Elyseum, de
estreno en Cuba, es la nueva propuesta del joven realizador Neill Blomkamp. Este
creador tuvo en su inicial Distrito
9 la voluntad de encontrar nuevos derroteros, algo no siempre fácil para la
ciencia-ficción, y la buena madre de sembrar una historia de aliens en su
Sudáfrica natal.
Epic, miniaturas aladas en un mundo verde
El cineasta japonés Hayao Miyazaki, la mayor sensibilidad viviente del
universo de la animación pese a su lamentable retiro hace unos meses, nos
enseñó a conmovernos con pequeñas grandes historias donde los muy distintos conceptos
de bosque, vida salvaje, medio ambiente, pequeñez física, amistad y solidaridad
alcanzan una sensación desconocida, con flechas de sentido dirigidas a
corroborar la certeza de lo colosal, magno y bello de este mundo en que vivimos
y las personas que lo habitan, por arriba de cualquier prejuicio negativo o
posible presunción desvirtuada. Esto, sin los desbordes melifluos de la escuela
Disney, y desprovisto del corte tan cargante de algunas fábulas morales del
cine de acción real.
domingo, 5 de enero de 2014
360: Un Meirelles cada vez más global e impersonal
Aunque es Ciudad de Dios (2002) la película cardinal de Fernando
Meirelles -y lo seguirá siendo toda la vida, sino cambia de tercio-, ya en
aquel drama-mosaico de las favelas era dable atisbar cierta afición desmedida a
epatancias e interrelaciones voluntariosas y un constructo signado por el afán
de hallar ecos globales en las resonancias discursivas. Lo último no sería
errado, de procurar una hermeneútica de la miseria a lo Luis Buñuel en Los
olvidados (1950), y así llevar el calvario marginal de los sufrientes
nacionales al encéfalo de la platea universal. Pero, a diferencia del español,
el brasilero nutría su “poética de los preteridos” de un deseo a ultranza por
conquistar vasta audiencia internacional, entregándole en bandeja la versión
cruentamente colorida e hiperrealista for export de lo por esta imaginado.